Ir al contenido principal

El Protector del Pueblo Cumple su Misión

 

El Protector del Pueblo Cumple su Misión



Hace unos días me preguntaron si dedicarme a aclarar ciertos aspectos de la historia me resultaba agotador. Mi respuesta fue que es algo inherente a mi naturaleza. Supongo que son lecciones que he aprendido con el tiempo. Me viene a la mente Don José García Cosío, quien durante años en mi ciudad natal explicó incansablemente la españolidad de Ceuta, respaldando sus argumentos en la prensa.

Siguiendo los pasos de ese gran maestro, intento desentrañar la compleja verdad histórica de esta ciudad, basándome en las fuentes más cercanas a los eventos ocurridos. No busco imponer mi propia versión, sino presentar la verdad documentada que muchos ignoran por desinterés. Por lo tanto, no puedo permitir que la historia sea manipulada, por razones que todos ustedes ya conocen.

Abordaré brevemente la historia del que fue el primer alcalde de La Línea de Gibraltar, para responder a ciertos comentarios, declaraciones y publicaciones que, aunque no desmerecen su labor, sí parecen ensalzar la de otros dejando en sombra la suya. Este escrito no tendría razón de ser si no se hubiese generado tal controversia, y como en otras ocasiones, prefiero no señalar a los autores.

Para quienes hayan leído "Senderos hacia la Ciudad: Historia de la Línea", algunos de estos detalles les resultarán familiares, pero proporcionaré un resumen que también servirá de recordatorio:

  • 16 de julio de 1869: Se presenta una solicitud a la Diputación para la segregación de San Roque, liderada por varios vecinos.

  • 6 de octubre de 1869: Los solicitantes, representados por Lutgardo López y Carlos Bianchi, refuerzan sus argumentos ante la Diputación, respondiendo a las objeciones del Ayuntamiento de San Roque.

  • 9 de marzo de 1870: El Gobernador comunica una orden del Ministro de la Gobernación y del Regente para que La Línea se segregue de San Roque, notificándolo a Lutgardo López Muñoz como primer firmante de la petición.

  • 8 de julio de 1870: Se designa a 11 personas para formar el Ayuntamiento. Juan González, fallecido, es reemplazado por Luis Ramírez.

  • 20 de julio de 1870: Se celebra el acto de posesión y Lutgardo es elegido Alcalde.

  • 21 de julio de 1870: El mandato del nuevo Ayuntamiento se hace efectivo.

  • 6 de agosto de 1870: Carlos Bianchi Rodríguez es nombrado secretario interino del Ayuntamiento, destacando su papel desde el inicio de la segregación.

  • Los desafíos incluyeron la formación de la administración municipal, la elaboración del padrón electoral y la definición del amirallamiento y presupuestos.

  • 19 de octubre de 1870: Algunos regidores se quejan del trato recibido por los primeros alcaldes y piden su dimisión, que no se concede.

A pesar de las dificultades, en solo un año y medio, se estableció una administración funcional. Esta información debería ayudarles a formar sus propias conclusiones. Les insto a no dejarse llevar por comentarios superficiales en redes sociales o por opiniones sin fundamento. No crean en lo que yo digo, sino en lo que los documentos muestran y que está a disposición de quien desee verificarlos.




Este párrafo del escrito ofrece una idea de la necesidad de recursos que el Ayuntamiento Provisional se enfrentó, que hasta el Ayuntamiento de San Roque se dirige a Diputación.


He decidido titular este texto con la interpretación que mi amigo Jaime me ha proporcionado del nombre Lutgardo.







Comentarios

Entradas populares de este blog

Más que pasteles: La historia de un lugar en el corazón de un pueblo

  Más que pasteles: La historia de un lugar en el corazón de un pueblo Deseo hablar de un gran negocio, de unos grandes profesionales, con una historia y trayectoria impecable. Han sido entrevistados innumerables veces y premiados otras tantas, son de fama reconocida y visitados desde toda la comarca. Sin embargo, continúo sintiendo la inquietud por contar, pero desconozco el qué. Dudo, como el niño que se aproxima a la vitrina y tiene que elegir uno de los dulces... Se siente observado por los adultos, y algo parecido experimento yo: un jubilado con su blog, una cámara de fotos al hombro, como si se tratara de un juego, un extraño entorpeciendo el desarrollo de un negocio. Pero observo. Observo a los clientes que esperan con paciencia en la fila, algunos charlan, otros miran con expectación las bandejas repletas de dulces. Es un ir y venir constante. Al principio, solo dos dependientes atienden con profesionalidad y calma. De pronto, son cinco. La cola se disuelve como por arte...

Balona: crónica de una tristeza anunciada

  Balona: crónica de una tristeza anunciada Gradas Estadio Municipal de La Línea Reconozco que el fútbol no me interesa más que en su aspecto histórico, algo de su aspecto deportivo y mucho de su influencia social. Por eso, quizá este escrito solo interesará a los menos. A aquellos que saben ver en un equipo de fútbol algo más que resultados. Y que saben también que perder partidos no siempre es lo más doloroso. A veces, lo que realmente duele es ver cómo se apaga el vínculo entre un club y su gente. En estos días, y especialmente después de la derrota en casa frente al Jerez, he conversado con personas que entienden de fútbol. Gente que ha seguido durante años a la Real Balompédica Linense, que ha vivido alegrías y frustraciones, y que ahora —dolorosamente— baja los brazos. Lo que me cuentan es desolador: que los jugadores, salvo un par de excepciones, no tienen el nivel; que han pasado tres entrenadores, lo que ya no permite culpar solo al banquillo; que el juego es tan pobre q...

La Línea: entre comercio y ocio

  La Línea: entre comercio y ocio El conflicto en torno al Mercado de Abastos de La Línea va más allá de tasas o metros cuadrados: refleja la encrucijada entre dos modelos de ciudad muy distintos. Un edificio necesario de rehabilitar He seguido con atención la trayectoria del mercado, no desde que comenzaron las obras de rehabilitación, sino mucho antes, casi desde sus comienzos. Históricamente parece que nació no con muy buenos signos, pero no me quiero desviar. Lo cierto es que, durante los años que lo conocí, no era un edificio que prestara unas condiciones adecuadas para el desarrollo de esas actividades. Su rehabilitación, por tanto, era una cuestión indiscutible. Dos razones enfrentadas Los acontecimientos posteriores, después de actualizar y revisar la información disponible, declaraciones escuchadas y publicadas, me llevan a pensar que las dos representaciones en litigio tienen razón. Cada una, con sus argumentos, expone verdades, y precisamente por eso se hace tan di...